lunes, 27 de marzo de 2017

373.- LA BELLEZA DE LO COTIDIANO



Todo aquello que vemos a diario, por muy extraordinario que sea, se convierte en casi invisible. Y es por ello que debemos revisarnos, revisitarnos y resetearnos. Para mirar de nuevo, con la mirada limpia, la mente curiosa y la sorpresa recuperada.




Todo esto es por el parque que tenemos enfrente de casa, El Parc de la Ciutadella, de ese fantástico parque del que ya hablé aquí.




Es el lugar preferido de Lola, porque allí puede correr suelta, jugar en la hierba, saltar por donde quiere y relacionarse con otras perritas y perritos.








Y por ese punto cotidiano que nos da el verlo a diario, el pasear por sus caminos y ser lo primero que vemos al asomarnos por las ventanas, se convierte en algo tan habitual que nos olvidamos  mirar con atención y valorar la suerte de vivir aquí.












Y a mí me vuelve cada cierto tiempo el deseo de volver a sacar fotografías allí, de ser un poco voyeur y espiar a todas las personas que de una forma u otra disfrutan de ese oasis de relax y diversión en una Barcelona que a veces resulta excesivamente bulliciosa y precipitada.

Mirad a través de mis ojos y de mi cámara, las caras, las manos, las sonrisas, el movimiento, el agua y la luz. Espero que veáis lo mismo que yo.





1 comentario:

idajorgegonzalez81@gmail.com dijo...

Pues me han entrado unas ganas inmensas de ir al parque sur, un parque precioso que tenemos cerca de casa.siempre pasamos y nunca paramos, con las prisas y el estrés. Gracias por el post, me encanta.